
(Por Dan Macías | Médico Cirujano)
Los ancianos de Chile no temen morir por COVID19: temen a la soledad (y nosotros mismos los hemos entregado a ella por causa del amor que decimos tenerles).
A veces el temor a equivocarme en la forma de expresar lo que pienso me ha inclinado a callar; me ha faltado el coraje mientras hablo en defensa de lo que sé y en esas ocasiones he sido cobarde, pronunciando palabras vacías, frases ambiguas y neutras, pero esa neutralidad sólo sirve para evitar enfrentamientos y cuestionamientos, lo cual la hace inútil a la hora de defender principios como Patria, Soberanía, Libertad, Honestidad y Familia, que, concretamente, son esenciales para el bienestar de varones, mujeres y niños chilenos. A ellos me dirijo, especialmente a las personas de bien de este país, personas de esfuerzo y de principios como los que enumeré, ya que esos principios peligran desde hace meses por causa del relato difundido respecto a COVID19, enfermedad que ha sido instrumentalizada para avalar las medidas sanitarias y políticas impuestas desde marzo de 2020. He escrito varios artículos analizando ese relato a partir del conocimiento profesional que poseo, apegándome con rigurosidad a los hechos y los datos y poniendo en palabras simples los resultados de la investigación bibliográfica que realizo, porque difundir esos resultados en forma de artículos es mi forma de apelar a la reflexión de quienes los lean y de despertar su consciencia, su noción de lo bueno y lo malo, su Sentido Común.
Soy varón, soy chileno, soy médico clínico, y no creo en el discurso oficial que repiten los medios chilenos de comunicación masiva junto a la casta política y una legión de profesionales, respecto al nuevo coronavirus.
Hay un temor colectivo a la muerte, que está latente en el subconsciente humano y que ha sido exacerbado intencionalmente por los medios hegemónicos de difusión masiva.
Conocemos a alguien a partir de lo que piensa, lo que dice y lo que hace; y a la coherencia de esos elementos le llamamos "carácter". A partir de la discordancia entre lo que las corporaciones de prensa hacen y lo que dicen, sabemos que carecen de carácter y, sin esa virtud, es imposible conservar principios. De ahí nace mi desconfianza hacia esas corporaciones y sus intenciones, así que me pregunto: ¿por qué razón se concertarían todos los mayores medios de comunicación televisiva y electrónica para hablar de muerte y de miedo, si sabemos que eso anula la capacidad reflexiva de las personas? ¿Lo hacen porque les preocupa el bienestar de los chilenos o porque esos medios de comunicación trabajan para su propio bienestar? Y me respondo desde la desconfianza que me inspira su falta de carácter y desde la evidencia empírica, estadística y científica: los medios masivos de comunicación en Chile, los mismos que hace un tiempo denunciaban colusiones de farmacias, este año se han coludido contra sus televidentes, lectores, radioyentes e internautas. Las empresas telefónicas no se quedan atrás, ya que, por ejemplo, MOVISTAR envía mensajes de texto, aludiendo a una situación riesgosa que supuestamente debe impulsarnos a elegir las formas electrónicas de pago y al mismo tiempo esos mensajes de texto pretenden hacernos creer que "debemos cuidarnos entre todos", lo cual es falso: permanecer dentro de mi casa no es cuidar la salud de nadie; tenemos el deber de cuidar a quienes dependen de nosotros, bajo nuestro propio techo, pero no estoy obligado a cuidar a los políticos de Chile, por ejemplo, ni a los que quemaron Chile en Octubre de 2019. MOVISTAR promueve una falsedad, los canales de TV también y el Ministerio de Salud (MINSAL) contribuye diariamente, en complicidad con el enemigo visible de los chilenos: la Organización Mundial de la Salud.
Compasión y honestidad es lo que NO tienen las plataformas comunicacionales, ni las emisoras chilenas de TV, ni los medios de prensa escrita y autoridades públicas y profesionales que, en Chile, han participado mediante acción u omisión, en el montaje respecto a COVID19.
¿Es COVID19 una enfermedad?
Cierto.
¿Hay un montaje respecto a esa enfermedad real? Sí, no hay ninguna duda. ¿El virus causante de COVID19 es de reciente descubrimiento? No me consta. ¿Los infectados asintomáticos transmiten el virus? No, y mi respuesta está respaldada por la OMS y también por investigaciones científicas independientes; además, un estudio de cuán contagioso puede ser un infectado asintomático portador de SARS-CoV-2 reportó que una mujer de 22 años, asintomática hospitalizada tuvo contacto con 455 personas, que incluyeron a otros pacientes, miembros de su familia y personal sanitario. Tras detectarse su caso, se realizó seguimiento a todos los contactos, los cuales no contrajeron la infección, tal como demostraron las pruebas con PCR que les realizaron a todos en dos ocasiones. ¿Cuál es el rol de los infectados asintomáticos? Hacen más segura la interacción humana cotidiana, ya que un infectado asintomático es alguien cuyo sistema inmunológico se encargó satisfactoriamente del virus y por eso no desarrolló la enfermedad; precisamente, causar la enfermedad en un individuo (o sea, generar tos, estornudos, fiebre, etc.) es el mecanismo por el cual el virus consigue propagarse, y un infectado asintomático es alguien donde el virus no pudo cumplir su propósito: un infectado asintomático es alguien que frena la transmisión del virus, es a